El mundo enfrenta una nueva etapa climática que podría transformar de manera irreversible los ecosistemas del planeta. Así lo revela un informe internacional que describe cómo la muerte masiva de los arrecifes de coral se ha convertido en el primer punto de inflexión climático catastrófico.
El estudio, elaborado por 160 científicos de distintas universidades y centros de investigación, detalla que el aumento sostenido de las temperaturas oceánicas ha provocado el peor blanqueamiento de corales jamás registrado, afectando a más del 80 % de estos ecosistemas marinos.
Según el documento, este fenómeno marca el inicio de una “nueva realidad climática” en la que los efectos del calentamiento global ya no son reversibles y comienzan a alterar los sistemas naturales de forma permanente.
Arrecifes de coral: el primer sistema colapsado
Los arrecifes de coral son considerados el pulmón del océano. Albergan miles de especies marinas y son esenciales para la protección de las costas y la seguridad alimentaria. Sin embargo, las olas de calor marinas de los últimos años los han llevado al borde de la desaparición.
“Hemos superado la capacidad de adaptación de los corales”, explicó Mike Barrett, asesor científico del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y uno de los autores del informe a CNN. La pérdida de estos ecosistemas, agregó, provocará impactos económicos, sociales y ecológicos a escala planetaria.
Lo que antes eran paisajes submarinos coloridos hoy se transforman en extensiones grises cubiertas de algas. Su degradación no solo amenaza la biodiversidad marina, sino también a las comunidades costeras que dependen directamente de ellos.
Nuevos riesgos y amenazas globales
El informe advierte que el planeta se acerca rápidamente a otros puntos de inflexión del sistema terrestre. Uno de los más alarmantes es el posible colapso de la Circulación Meridional Atlántica de Retorno (CMA), una red de corrientes oceánicas que regula el clima del Atlántico.
De ocurrir, podría generar cambios extremos en las estaciones, alterar los monzones y aumentar el nivel del mar, afectando a millones de personas. “El riesgo de que ocurra en la vida de las generaciones actuales es real”, señaló Barrett.
Los investigadores advierten además sobre el peligro de una pérdida irreversible de la selva amazónica, junto con el derretimiento acelerado de las capas de hielo polares, eventos que podrían agravar aún más el aumento de las temperaturas globales.
Un rayo de esperanza: el avance de las energías limpias
A pesar del diagnóstico crítico, el informe también resalta signos positivos. Los avances en energía solar, vehículos eléctricos, baterías y bombas de calor muestran una transformación energética en marcha. Estas tecnologías limpias, señala el texto, “han alcanzado un punto de inflexión positivo”: son más baratas, eficientes y sostenibles que las opciones contaminantes, lo que hace improbable un retroceso hacia los combustibles fósiles.